Griñán, rodeado por su equipo compartiendo la euforia de los resultados. | Efe
- El PP se distancia del PSOE por poco más de un punto porcentual
- En noviembre, en las generales, la diferencia fue de nueve puntos
- Los 400.000 votos de más en favor de Rajoy se reducen a 40.000 ahora
- El PSOE gana las elecciones en Sevilla, Huelva y Jaén
- El PP sólo se adjudica una victoria rotunda en Almería
- Las diferencias son mínimas en Cádiz, Granada y Málaga
- Griñán es el gran triunfador de la noche: pierde pero gobernará
- Izquierda Unida consigue duplicar sus escaños y 110.000 votos másE
- El Partido Popular ha ganado por vez primera las elecciones autonómicas en Andalucía, pero se queda muy lejos de la mayoría absoluta de 55 parlamentarios que le hubiera dado el gobierno de la comunidad. Con 50 escaños al 100% escrutado a las 23.54 del domingo, el PP tendrá una 'amarga victoria' en Andalucía porque el panorama que se dibuja en el horizonte es un más que probable pacto PSOE-IU que le garantizará la gobernabilidad a José Antonio Griñán.
Se trata de una situación inédita en la política andaluza. Si bien entre 1996 y 2004 hubo gobiernos de coalición (PSOE-PA), en esas dos legislaturas era el partido vencedor en las elecciones el que buscaba apoyos para forjar una mayoría parlamentaria. Ahora será distinto, porque PSOE e IU tendrán que entenderse para cerrarle el paso al triunfador en las urnas.
El presidente andaluz y candidato socialista a la reelección es el gran triunfador de la jornada por encima de cualquier otro. Aislado de su partido, enfrentado con el secretario general Alfredo Pérez Rubalcaba, con una campaña llena de tropiezos, conseguirá retener el gobierno de la Junta de Andalucía en manos socialistas cuando nadie apostaba por él.
El presidente andaluz y candidato socialista a la reelección es el gran triunfador de la jornada por encima de cualquier otro. Aislado de su partido, enfrentado con el secretario general Alfredo Pérez Rubalcaba, con una campaña llena de tropiezos, conseguirá retener el gobierno de la Junta de Andalucía en manos socialistas cuando nadie apostaba por él.